GOZO
Gozo es lo que el hombre anhela, y lo que busca; lo encuentra cuando encuentra a Dios, y solamente entonces. Retiene este gozo en la proporcion en que crece en el conocimiento de Dios. Dios es el autor del verdadero gozo, como de toda buena dadiva. Siendo el perfectamente bueno y por encima de todo mal. Es presentado como hallando su propio gozo en el arrepentimiento del pecador que vuelve para buscarle. Al haberse introducido el pecado, y habiendo quedado el hombre por ello alienado de Dios, su idea de gozo es llegar a ser tan feliz como pueda sin Dios y alejado de el (vease la historia del hijo prodigo en Lc. 15). Pero el unico resultado de un curso tal es el desengaño y la amargura aqui abajo y el eterno dolor en el mas alla. Sin embargo, cuando la luz del amor de Dios, revelado en el don y en la muerte de su Hijo, resplandece en el corazon, este queda lleno en el acto de «gozo inefable y glorioso» (1 P. 1:8).
«El reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espiritu Santo» (Ro. 14:17). Asimismo, el fruto del Espiritu es amor, gozo, paz, y otras hermosas caracteristicas, y es producido en el corazon del creyente por el Espiritu para la gloria de Dios (Ga. 5:22, 23). El apostol deseaba para los romanos que el Dios de esperanza los llenara de todo gozo y paz en el creer (Ro. 15:13). Tambien los tesalonicenses habian recibido la palabra «en medio de gran tribulacion, con gozo del Espiritu Santo» (1 Ts. 1:6). Muchos mas pasajes podrian ser citados para mostrar como el gozo es una de las caracteristicas principales de aquellos que han sido conducidos al conocimiento de Dios. El unico Hombre que jamas tuvo que ser conducido a este conocimiento,
por cuanto su delicia habia estado siempre en Dios, como la de Dios estaba en el, Aquel que habia sido llamado «varon de dolores», este hombre perfecto y bendito tenia su propio gozo en la comunion con Dios en dependencia de el. Y el desea para los suyos en este mundo que su gozo sea tambien el de ellos (Jn. 17:13).
El verdadero gozo no es conocido en el mundo en su estado presente; pero llegara el dia en que el dolor, el sufrimiento, la muerte, y todos los tragicos frutos del pecado, seran quitados, cuando Dios mismo enjugara todas las lagrimas, llenando el universo con un gozo eterno y sin sombras. Este dia esta descrito en Ap. 21.