ISAI
= «Jehova es».
Hijo de Obed, belenita, padre del rey David. Es poco lo que se registra de el. Cuando David fue perseguido por el rey Saul, Isai fue protegido, junto con su esposa, por el rey de Moab, en cuya tierra hallaron refugio (1 S. 22:1-4).
El Mesias, hijo de David, recibe tambien el nombre de «una vara del tronco de Isai» y «la raiz de Isai» (Is. 11:1, 10).
ISAiAS
tip, BIOG PROF CRIT HIST HOMB HOAT LIAT
fot, dib00174, dib00175, dib00406
ver, MANUSCRITOS BiBLICOS, QUMRaN
sit,
= «Jehova ha salvado».
Profeta de Juda bajo los reinos de Uzias, Jotam, Acaz y Ezequias (Is. 1:1; cfr. 6:1; 7:3; 14:28; 20:1,
2; 36:39).
Era hijo de Amoz, que no debe ser confundido con el profeta Amos. Son pocas las indicaciones acerca de su personalidad. Pero en base a algunos pasajes, se advierte que se trata de un caracter humilde y compasivo (Is. 6:5; 16:9; 21:3; 65:2). Son asimismo pocas las indicaciones acerca de su familia. Su padre era Amoz, del que tambien se hace mencion en 2 R. 19:2.
Segun Is. 7:3 y Is. 8:13, 18, el profeta estaba casado, y era padre de al menos dos hijos.
(a) ePOCA.
La epoca de Isaias es de facil determinacion, como ya hemos visto de los datos que proporciona el libro. Fue llamado al oficio profetico en el año de la muerte del rey Uzias (Is. 1:1; 6:1), alrededor del año 758 a.C. Ejercio su ministerio hasta el final del reinado de Ezequias (invasion de Senaquerib, 701-700 a.C.). Entre estos dos reyes hubo los reinados de Jotam y de Acaz (32 años en total, 2 Cr. 27:1; 28:1). Pero todo induce a creer que prosiguio su ministerio bajo Manases (2 R. 21), al menos durante uno o dos años. Lo que permite suponer esto, es:
(A) El conjunto de profecias acerca de las desventuras del pueblo exiliado (Is. 40-66), que reflejaban unas pruebas ya conocidas, y
(B) la tradicion judia que relata que Isaias murio martir bajo el reinado del impio Manases. Segun esta tradicion, fue condenado a muerte por haber osado decir que habia visto a Dios (Is. 6), y por haber comparado Jerusalen con Sodoma y Gomorra (Is. 1:9; 3:9). Otra tradicion dice que fue muerto por haber añadido, con sus oraculos, a la Ley de Moises, o por haberla contradicho. Poco importa por que, lo que parece cierto es que murio martir, y se cuenta que, habiendose refugiado el profeta dentro del tronco hueco de un cedro, el rey dio orden de serrar el arbol con el dentro. Es posible que sea a este hecho al que se hace alusion en He. 11:37.
El reinado de Ezequias fue de 29 años (2 Cr. 29:1), por lo que la actividad de Isaias debio de ser ejercida durante alrededor de 60 años, desde la muerte de Uzias, en el año 758 a.C., hasta el inicio del reinado de Manases, en el año 698 a.C. Si se supone que el profeta tenia solamente 20 años cuando fue llamado, su vida se prolongo alrededor de 80 años, y la fecha de su libro puede situarse entre los años 750 y 700 a.C.
(b) MARCO HISToRICO.
Isaias era del reino de Juda, y alli profetizo, en uno de los periodos mas criticos de la historia de su pais. Para comprender su mensaje, es preciso tener conocimiento de esta historia. A continuacion se da el resumen de las monarquias citadas por el mismo profeta (Is. 1:1).
El reinado relativamente pacifico de Uzias (cfr. 2
R. 16:3; 2 Cr. 26:1, 23) fue seguido por una serie de calamidades (2 Cr. 26:16-23). Bajo el reinado de Jotam, Rezim, rey de Damasco, y Peka, rey de Israel, habian tratado de destruir el reino de Juda (2 R. 15:37; 16:5). La lucha se prolongo hasta dentro del reinado de Acaz. Es en esta epoca que Isaias profetizo la cercana caida de los enemigos de Juda y la ascension del poder de Asiria (Is. 7- 8). Poco despues, los acontecimientos confirmaron su predicacion: Siria y Samaria fueron invadidas por Tiglat-pileser y Damasco fue tomada (732 a.C., cfr. 2 R. 16:7; 15:29; 2 Cr. 28:16; Is. 17:1, 3). Diez años mas tarde, se precipito la caida del reino del norte, cayendo Samaria en el año 722 mientras Ezequias reinaba en Juda (2 R. 17:3; 18:9; Is. 28:1). Sargon emprendio una campaña contra Palestina y Egipto (Is. 10; 20). Despues, Senaquerib invadio Juda en el año 701 a.C., poniendo sitio a Jerusalen, sitio que tuvo que levantar debido a una intervencion milagrosa del
Señor (Is. 14:24, 27; 17:12, 14; 38; cfr. 2 R. 18:13;
19:37). Entonces el profeta proclamo la caida del imperio asirio; estaba resurgiendo el imperio babilonico, y en su busqueda de grandeza trataba de hallar aliados. Incluso envio una delegacion a Ezequias (2 R. 20:12-13).
(c) MENSAJE DE ISAiAS.
Llevado por el Espiritu, Isaias denuncia las infidelidades de su pueblo. Ve en estas infidelidades la causa basica de las desventuras que cayeron sobre el reino del norte de Israel, amenazando a Juda con un castigo semejante en un termino mas o menos largo. Profeta de Juda, reprocho a su pueblo por su supersticion, su formalismo, su idolatria, su crueldad, su inmoralidad y codicia. Pero tambien ataca los pecados de los enemigos de Juda (Babilonia, Is. 13; 24; 47; Tiro, Is. 23; Asiria, Is. 10; 33; Edom,
Is. 34-35).
De todas formas, su mensaje no deja de dar una nota de esperanza. Esta nota de esperanza domina su obra. Si predice a su pueblo el cautiverio y los prolongados sufrimientos, anuncia tambien el retorno del exilio y la liberacion (Is. 40). Llega incluso a precisar el nombre del liberador, y ello dos siglos antes de su nacimiento, en la persona de Ciro (Is. 44:28; 45:1, 13). Y, mas alla de la vision de la liberacion de Juda y su restauracion (Is. 44; 45; 60; 61), el profeta, cuyo mensaje es esencialmente mesianico, tiene la vision sublime del Siervo de Jehova. Este «Ebed Yahveh» vendra, no solo para socorrer a Israel, sino para dar a todos los pueblos de la tierra su Espiritu de paz, de justicia y de salvacion. Este Siervo, en definitiva, se revela al profeta bajo los rasgos de Varon de dolores, del Mesias que lleva sobre si el pecado del pueblo y que, por sus sufrimientos y expiacion, vendra a ser el Mesias victorioso y el Salvador del mundo. Es esta vision, cuya expresion mas sublime se halla en Is. 52:13-53:12, la que permite llamar a Isaias el quinto evangelista.
Muchos exegetas, al examinar los caps. 44 a 53, han emitido las siguientes opiniones en cuanto a la identidad del Siervo de Jehova:
(A) Para unos, el profeta lo habria visto bajo los rasgos de Ciro, el libertador de los exiliados (Is. 44; 45), pero esta es una opinion insostenible. En los caps. 44 y 45 solo se trata de la restauracion de Jerusalen y del Templo y Ciro nunca recibe el epiteto de Ebed Yahveh. El profeta lo llama: mi pastor (rey) (Is. 44:28), ungido (Is. 45:1), y es presentado como libertador (cfr. Is. 45:13).
(B) Para otros, el profeta habria tenido una vision de caracter doble:
(I) En principio, el profeta habria visto en el Siervo de Jehova una colectividad. Esta colectividad tenia el nombre de «Jacob», «Israel» (Is. 44:1, 2, 21; 45:4; 48:20; 49:3, 5). Se trata, examinando bien el texto, de un remanente. Los exiliados fueron, como la mayor parte de sus antepasados, infieles (Is. 48). El profeta veia al Siervo en un residuo de Israel, molido y purificado por los sufrimientos del exilio, y espiritualmente victorioso de la prueba (Is. 45:20-25). De ahi el llamamiento a los exiliados que se mantuvieron fieles en tanto que muchos de sus hermanos habian sucumbido a las tentaciones de Babilonia; de ahi la poderosa proclamacion del llamamiento de Israel (Is. 46:3; 49:6).
(II) Despues, el profeta, consciente de que ningun residuo, de que ninguna colectividad podria llevar a cabo la obra mesianica querida por Dios, fue llevado en su vision a centrarse a ver el Siervo en una persona. El solapamiento entre la vision colectividad y la vision persona es perceptible, especialmente en Is. 50-52:1-12. Lo cierto es que ni el pueblo de Israel en su conjunto, ni una elite de este pueblo, podrian pretender cumplir la voluntad de Yahveh-Salvador. Ello solo podria hacerlo un individuo puesto aparte, diferente de los hijos de los hombres (Is. 52:14), apto, por su doble naturaleza, humana y divina, para llevar nuestras enfermedades y cargar sobre Si nuestras iniquidades (Is. 53:4-5).
No debe sorprender que se nos ofrezcan estos dos planos sucesivos en el mensaje mesianico de Isaias. Israel habia sido elegida como nacion para ser luz a las naciones, y para llevar la salvacion hasta los extremos de la tierra (Is. 49:6). Al recordar esta vocacion que un residuo fiel al menos hubiera debido llevar a cabo, lo mismo que al reducir el Siervo fiel a una sola persona, el profeta esta ademas lanzando un reproche a su pueblo. Asi es como se puede explicar el aparente solapamiento de las dos visiones del Siervo de Jehova: el Siervo de Jehova colectivo, que es el remanente de la nacion, en medio del cual aparece el verdadero Siervo de Jehova, la persona del Mesias. Asi como Israel fue una vid plantada por Jehova, pero que dio uvas silvestres (Is. 5:1-7), el Mesias pudo decir: «Yo soy la vid verdadera» (Jn. 15:1). Y tambien el es el Siervo fiel, en medio de un residuo que, en tanto que le reconozca, vendra a ser tambien Siervo de Jehova. Asi, el profeta presenta al Siervo-Persona irrumpiendo y dominandolo todo. Y los cristianos, iluminados por el Evangelio, no pueden dejar de percibir la
patente identidad del Siervo unico, tal como aparece en los caps. 52:13-53:12, con la persona de Jesucristo. este es uno de los puntos culminantes de la inspiracion profetica, junto con el Salmo 22 y otras joyas profeticas.
El mensaje de Isaias desborda el marco de la historia y salvacion espiritual de Israel y de las naciones. Describe los tiempos mesianicos, esto es, el reino de Dios sobre la tierra. En relacion con esto se deberian leer Is. 24-27; 60-65; 8:23-9:6;
11. Asi, tiene un caracter escatologico. La panoramica que Isaias nos ofrece es vasta. Abarca el dilatado periodo de tiempo desde la epoca del profeta hasta la segunda venida de Cristo, y su reinado de paz. El mensaje del libro puede quedar clasificado alrededor de estos tres temas fundamentales:
(A) Temas especificamente historicos (Is. 1-39, excepto algunos pasajes escatologicos: Is. 8:23- 9:5; 11; 24-27),
(B) tema mesianico (Is. 40-55),
(C) tema escatologico (Is. 56-66 y 8:23-9:6; 11; 24-27).
(d) PROBLEMA CRiTICO.
Si para nosotros la autenticidad del libro de Isaias no puede ser puesta en tela de juicio, no sucede asi con una gran cantidad de criticos. Se puede afirmar que «la teologia oficial» rechaza la
«isaicidad», es decir, la paternidad de toda la obra por parte de Isaias. A continuacion se da cuenta muy resumida de estas hipotesis criticas, con un sumario de las razones para rechazarlas.
La Alta Critica afirma que este libro fue escrito por un minimo de tres autores: Isaias uno de ellos, indudablemente, y dos autores anonimos posteriores que habrian situado sus escritos bajo la cubierta de la autoridad de Isaias (ficcion literaria). Recapitulamos las alegaciones que se presentan de la siguiente manera:
(A) Isaias habria escrito los caps. 1-39, a excepcion de una serie de pasajes a lo largo de estos capitulos, que no le podian ser atribuidos.
(B) Los caps. 40-55 tendrian por autor a un escritor anonimo de la epoca del exilio, a quien se le da el nombre de «deutero-Isaias». El profeta describe aqui una situacion totalmente diferente a la de los capitulos anteriores, esto es, la situacion acerca de la que tuvo que dar testimonio al retorno de Babilonia. El estilo, ademas, seria diferente, asi como el vocabulario. Y, de todas maneras, ¿como habria podido Isaias anunciar el nombre de Ciro casi dos siglos antes del nacimiento de este rey? Esta seccion habria sido escrita alrededor del año 540 a.C.
(C) Finalmente, los caps. 56-66, con un estilo mas lirico y mas mistico a la vez, de un tema esencialmente escatologico, pertenecerian a otro autor de una epoca muy incierta (300 a.C. para unos, alrededor del año 200 a.C., para otros). Esta seccion recibe el nombre de «trito-Isaias».
A las hipotesis de la Alta Critica se puede responder concisamente con las palabras de Edward Strachey: «Las normas de la critica nos imponen la aceptacion de Isaias como autor unico hasta que no se nos demuestre lo contrario.» Estas pruebas no nos han sido dadas, y las normas sobre las que reposa la hipotesis de los dos autores anonimos son sumamente fragiles: la psicologia y el vocabulario (o estilo). Se trata de argumentos profundamente subjetivos. ¿Por que rechazar que un profeta que predijo el exilio podria tambien predecir el retorno del exilio? Tampoco hay dificultad alguna en admitir que un autor que ha estado escribiendo a lo largo de casi 60 años haya podido manifestar estilos literarios diferentes, con variacion de vocabulario, entre los escritos de la juventud, los de la madurez, y los de la ancianidad. El estilo y el vocabulario de «La doctrina cristiana» y de ciertos poemas y cartas de John Milton son muy diferentes en estilo y vocabulario de su «Paraiso perdido», de manera que ahi tambien, siguiendo los metodos de la Alta Critica, podrian suponerse diferentes autores Y los ejemplos podrian multiplicarse. Sobre este tema,
C. S. Lewis tiene un interesante articulo titulado
«Fern Seeds and Elephants» en un libro de ensayos y articulos que lleva el mismo titulo.
La verdadera razon que explica que se propongan estas hipotesis es el rechazo «a priori» de lo sobrenatural, la negacion, ya de entrada, de la inspiracion de la Biblia. La Alta Critica rechaza admitir que un profeta pudiera predecir acontecimientos que fueran a producirse muchos siglos despues de el; rehusa admitir que el Isaias del siglo VIII a.C. hubiera podido dar el nombre de una persona del siglo VI a.C., Ciro, porque no cree en la Biblia, la Palabra del Dios que anuncia lo por venir desde el principio (Is. 46:10). Para todo el que cree con Pablo que «toda la Escritura es inspirada por Dios» (2 Ti. 3:16), la unidad del autor no constituye ningun problema. Isaias, el profeta que firmo y fecho su libro (Is. 1:1), es su unico autor humano.
Y esta era la postura de Jesucristo y de sus apostoles, con toda la autoridad que ello tiene. Es a Isaias que le atribuye de manera indiscutida la paternidad de los caps. 40-66, al igual que los caps. anteriores. Mt. 8:17 cita el cap. 3 de Isaias en estos terminos «…para que se cumpliese lo
dicho por el profeta Isaias» .Del mismo modo, Mt. 12:17-21 cita Is. 42:1-4; Lc. 3:4 cita Is. 40:3; Lc.
4:17-19 cita Is. 61:1-3; Jn. 1:23 cita Is. 40:3; Jn.
12:38-41 cita Is. 53:1; etc. Por ultimo, se debe destacar que la unidad del libro de Isaias ha sido matematicamente confirmada por el rollo completo de Isaias descubierto en la Cueva I de los mss. de Qumran, en el año 1947. Este rollo, al que se le ha asignado una fecha de 100 a 120 a.C., es un ms. que reproduce integramente la profecia, y sin ninguna indicacion que pueda llevar a confirmar las hipotesis de la Alta Critica. (Veanse MANUSCRITOS BiBLICOS, QUMRaN.)
Con W. H. Guiton («Introduction à la Bible, p. 142), podemos decir del libro de Isaias que «es un majestuoso edificio en el que parece que hallamos todos los estilos, pero de manera que dan impresion de armonia. Sobre la fachada de este edificio aparecen, en caracteres flamigeros, estas palabras: «Santo, santo, santo, Jehova de los ejercitos; toda la tierra esta llena de su gloria» (Is. 6:3).