Escribe lo que andas buscando

 

SIERRA

Posted on

SIERRA
Útil de dientes aguzados, usado para cortar madera y piedra (1 R. 7:9; Is. 10:15). Hubo perseguidores que aserraron sus víctimas (He. 11:37). El rey David sometió a servidumbre a los amonitas de Rabá y de otras ciudades vencidas, y los puso a trabajar con sierras y otros instrumentos

(2 S. 12:31; 1 Cr. 20:3). La lectura alternativa de este texto, que le haría decir que David los aserró, los cortó a hachazos, etc., además de no ser demandada por el texto mismo, iría en contra de todo lo que se conoce del carácter de este rey.
Hasta allí donde podemos saber, los antiguos egipcios tenían sierras de un solo mango. La hoja, generalmente de bronce, se insertaba en el mango, quedando unido a él mediante tiras de cuero. Los dientes se inclinaban hacia el mango. El trozo de madera a cortar se ponía perpendicular a un cuadro, y se serraba de arriba abajo. No se tienen pruebas de que los egipcios serraran también la piedra, lo que habría sido difícil con una sierra de un mango. Los asirios empleaban una sierra de doble mango, provista de hoja de hierro.
SIERVO. Véase MINISTERIO. SIERVO DE JEHOVÁ
ver, MINISTERIO, ISAÍAS

(A) Aquel que reconoce a Jehová como su Dios y que cumple fielmente Su voluntad, como Abraham (Sal. 105:6); Moisés (v. 6); David (132:10); Isaías (Is. 20:3).
(B) El Siervo de Jehová es el tema de los caps. 40 a 66 de Isaías (cfr. especialmente Is. 42:1-7; 49:1- 6; 50:4-9; 52:13-53:12).
Sobre ello, el profeta tiene una doble visión:
(I) Israel, en tanto que pueblo elegido, es el siervo elegido por Jehová para glorificarle entre las naciones (Is. 44:1-2, 21; 45:4; 48:20; 49:3); pero la profecía anuncia que Israel sería infiel y que caería bajo los juicios de Dios. Por esta razón:
(II) el Mesías será el verdadero servidor de Jehová; aportará la luz y la salvación no sólo a Israel, sino también a las más lejanas naciones (Is. 49:5-7; 52:13-53:12). Los Targumes mismos asimilan el Siervo sufriente de Is. 15:53 al Mesías. Este siervo, sin pecado, se identifica con Israel para representarlo ante Dios. Como sustituto de los pecadores, y habiendo sido golpeado en lugar de ellos, los justificará plenamente (cfr. en particular Is. 53:4, 5, 6, 8, 10, 11, 12). Para llevar a cabo una obra tal, el Siervo de Jehová debe participar de la naturaleza divina (Jer. 23:5-6; Zac. 3:8-10). (Véase ISAÍAS).
Para un examen más a fondo de este tema, se recomienda la siguiente bibliografía.