Vivir en pecado deja un gran vacío en el corazón y crea una gran lejanía entre una persona y Altísimo. Los resultados de una vida en pecado son dolor, temor, soledad, agresividad, traición, rechazo y matanza espiritual. A través de su hijo Señor, Salvador ofrece una alternativa para quienes se sienten desenfrenados y hundidos en tanta oscuridad. La oración de salvación es para aquellos que quieren dar el primer paso para restaurar su relación con Dios.
¿Cómo sé si necesito hacer esta oración?
Romanos 3:23 dice: Todos han pecado y están destituidos de la gloriosa presencia de Dios. La palabra clave en este versículo es «todo». Todos necesitamos a Dios. Todos somos pecadores. Todos debemos reconciliarnos con Dios. Toda persona que quiera establecer una relación con él debe aceptar la salvación que nos ofrece a través de su hijo Jesús. Sabes que necesitas hacer esta oración porque sientes una preocupación en tu corazón. Esa preocupación es que el Espíritu Santo te está diciendo que necesitas un cambio y que Dios quiere trabajar en tu vida.
Si nunca has abierto tu corazón a Jesús para entrar en él, debes hacer la oración de salvación. Si tuviste una relación con Dios antes, pero la descuidaste y comenzaste a vivir en pecado, entonces también puedes hacer esta oración. Nadie puede hacerlo por ti porque es un asunto personal entre tú y Dios. Vivir para Cristo es una decisión que solo tú puedes tomar.
Oración por la salvación
Orar es simplemente hablar con Dios. No hay forma incorrecta de decirle a Dios cómo se siente. Él sabe lo que hay en tu corazón antes de que las primeras palabras salgan de tu boca. Todo lo que necesitas para orar es fe. Si desea ayuda con lo que puede decir, puede preguntar de la siguiente manera:
Que esperar después de la oración
¡Dios te ha escuchado y el trabajo está hecho! Romanos 3:22 dice: «Por la fe en Jesucristo, Dios justifica a todos los que en El creen». Por la fe has recibido la salvación que Dios nos ofrece por gracia. Si ya le has entregado tu corazón a Jesús y puedes confiar en que él estará a tu lado todos los días para ayudarte y animarte.
Cuando te despiertes cada mañana, pídele al Señor que te ayude a ser mejor persona de lo que eras el día anterior. Se fiel y Comprométete a dar un paso adelante todos los días. Tómese el tiempo para leer la Biblia y orar. Recibirá mucho apoyo al unirse a una iglesia cristiana.
Dios bendecirá todos sus verdaderos esfuerzos.