PLOMO
(heb. «ophereth»).
Era un metal conocido por los antiguos.
Los israelitas hallaron plomo en el botín arrebatado a los madianitas (Nm. 31:22). Los egipcios lo utilizaban (Contra Apión 1:34); era muy abundante en la península del Sinaí; también se hallaba en Egipto y en Tarsis (Ez. 27:12), de donde se exportaba.
El plomo se empleaba para pesar (Zac. 5:7); se escribía sobre tabletas de plomo (Tácito, Anales, 2:69; Plinio, Historia Natural 13:21; Pausanias
9:31, 4). Jb. 19:24 sería una alusión a estas tabletas, pero se puede admitir que Job deseara tallar las letras en la peña para que quedaran indelebles.