MISTERIO
Termino procedente del vocabulario religioso de los griegos, designando una doctrina particular y practicas secretas. Solamente los iniciados participaban en los ritos y solemnes purificaciones u orgias de los misterios paganos (misterios orficos, eleusinos, de Cibeles, de Isis y Osiris, de Mitra, etc.).
En el NT, este termino expresa una accion o dispensacion de Dios guardada en secreto hasta la hora precisa y determinada (Ro. 16:25-26) o hasta que el Espiritu Santo haya preparado al hombre para la recepcion de la comunicacion (Mr. 4:11). Un «misterio» asi revelado no debe ser guardado en secreto, sino al contrario, proclamado en publico: el misterio escondido durante el transcurso de los siglos es ahora manifestado y puesto al conocimiento de todas las naciones (Ro. 16:25-26); este misterio, del que Pablo tuvo conocimiento, no habia sido manifestado a las anteriores generaciones, como ha sido revelado ahora por el Espiritu a los santos apostoles y profetas de Cristo (Ef. 3:3-5, 9; Col. 1:26, 27). Los fieles son en la actualidad los dispensadores, esto es, no solo los administradores, sino tambien los divulgadores de los misterios de Dios (1 Co. 4:1). Sin embargo, el misterio contiene un elemento sobrenatural que sobrepasa al hombre a pesar de la revelacion dada. Solamente conocemos en parte (1 Co. 13:12); precisaremos de la eternidad para sondear las cosas profundas de Dios. Pablo es el que, por su mismo llamamiento, hace mencion
mas frecuente del vocablo «misterio» (22 veces en el gr.).
Los principales misterios biblicos son:
(a) El misterio del reino de los cielos (Mt. 13:3- 50; cfr. v. 11).
(b) El misterio de la salvacion en Jesucristo (Ro. 16:25, 26) llamado tambien misterio de la piedad (1 Ti. 3:16), de la fe (1 Ti. 3:9), del Evangelio (Ef. 6:19, 20)
(c) El misterio de Dios, y de «Cristo en nosotros», la esperanza de gloria (Col. 1:26, 27; 2:2-3; cfr. 1 Co. 2:7; cfr. tambien Ap. 10:7)
(d) El misterio de la Iglesia, el cuerpo de Cristo, compuesta de creyentes procedentes del judaismo y del paganismo (Ef. 3:6).
(e) El misterio del arrebatamiento de la Iglesia (1 Co. 15:51-52; 1 Ts. 4:14-17).
(f) El misterio del endurecimiento de una parte de Israel durante la era de la Iglesia (Ro. 11:25).
(g) El misterio de la iniquidad (2 Ts. 2:7), que sera totalmente desvelado en la aparicion del Anticristo.
(h) El misterio de Babilonia, la gran ramera (Ap. 17:5-7), es decir, de la falsa religion desenmascarada al fin de los tiempos.
En la Vulgata, el termino griego «mysterion» ha sido traducido por el latino. «sacramentum»,
«sacramento» en castellano. De ahi es que la Iglesia de Roma se ha basado para establecer sus siete sacramentos, que no tienen ninguna verdadera relacion con los «misterios» del NT. Ademas, el bautismo y la Cena no reciben en absoluto el nombre de sacramentos ni misterios por parte de Cristo ni de los apostoles, no usandose este termino en los textos correspondientes.